La cofradía pasará de ocupar un cuarto en el salón parroquial a una casa hermandad de 1.800 metros
LA OPINIÓN DE MÁLAGA IGNACIO A. CASTILLO. MÁLAGA VER NOTICIA
Nueva Esperanza vivirá en breve una revolución en su día a día, ya que el próximo 18 de diciembre inaugurará y bendecirá su nueva casa hermandad, situada junto a su sede canónica, la iglesia de Santa Ana y San Joaquín. Verá cumplido así un anhelo principal en su breve, aunque intensa historia. Doce años después de obtener la cesión del solar. Y experimentará la sensación, siempre agradable, que se tiene al disponer de espacio. De hecho, la cofradía dejará de ocupar un pequeño cuarto en los salones parroquiales para irse a un gran edificio de 1.8000 metros cuadrados útiles, y que aspira a convertirse en un referente en el barrio de Nueva Málaga.
El hermano mayor de la corporación del Martes Santo, Francisco Javier Benítez, reconocía ayer que aún no se lo terminaba de creer. «Me tengo que ver allí», insistía. La inauguración será doble: en primer lugar, por la mañana, a las 11.00 horas, para las autoridades, con la presencia del nuevo delegado episcopal de Cofradías, Francisco Aranda, y el párroco y director espiritual, Andrés Merino; y después, por la tarde, para los vecinos del barrio.
«Aún estamos pendientes de que los invitados nos confirmen su asistencia», indicó el hermano mayor, quien explicó que el proyecto de la casa hermandad es de HCP Arquitectos, mientras que las obras las ha llevado a cabo la empresa de construcciones Chirivo. La primera piedra se colocó el 2 de noviembre de 2008 y las obras no comenzaron hasta el 9 de septiembre del 2009. Un año y tres meses después, la cofradía ya podrá hacer uso de sus nuevas instalaciones.
Se trata de un edificio de dos plantas sobre la baja, además de un sótano de 410 metros cuadrados, donde la cofradía ha construido los columbarios, cuya venta servirá para ir pagando la hipoteca. Además, en este nivel inferior se sitúan talleres de manualidades y un almacén.
En la planta baja está el salón de tronos, además de otros dos talleres y tres cuartos de baño. En la primera planta se sitúa la zona administrativa: despacho del hermano mayor, Secretaría, Tesorería, Albacería y Archivo. Y en la segunda planta va el salón de actos y un pequeño salón social, con cocina incluida. Por último, también dispone de una terraza con zona habitable, así como un campanario, que corona la edificación.
Francisco Javier Benítez recordó que la cofradía obtuvo la cesión del solar para construir su casa hermandad hace ya doce años, pero que el inicio de las obras se demoraron, al principio, por falta medios, y después porque la cofradía estuvo negociando con el Ayuntamiento la cesión de otra pequeña parcela de apenas 110 metros cuadrados que iba a quedar vacía entre la sede cofrade y el centro de salud de Nueva Málaga, que finalmente fue autorizada e incluida en el proyecto, por lo que se tuvo que volver a empezar.
