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Cristo Crucificado de Santa Ana

raulyjosemariabendi“… Sabiendo Jesús que ya todo estaba consumado, dijo , y había allí una vasija llena de vinagre; entonces ellos empaparon en vinagre una esponja, y sujetándola a una rama de hisopo, se la acercaron a la boca. Luego que Jesús tomó el vinagre, dijo Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.  Entonces los judíos, por cuanto era la preparación de la pascua, a fin de que los cuerpos no quedasen en la cruz en el sábado (pues aquel sábado era de gran solemnidad), rogaron a Pilato que se les quebrasen las piernas, y fuesen quitados de allí.  Vinieron, pues, los soldados, y quebraron las piernas al primero, y asimismo al otro que había sido crucificado con él.  Más cuando llegaron a Jesús, como le vieron ya muerto, no le quebraron las piernas.  Pero uno de los soldados le abrió el costado con una lanza, y al instante salió sangre y agua.  Y el que lo vio da testimonio, y su testimonio es verdadero; y él sabe que dice verdad, para que también vosotros creáis. Porque estas cosas sucedieron para que se cumpliese la Escritura: No se le quebrará ningún hueso. Y también otra Escritura dice: Mirarán al que traspasaron. (Juan xx 28-37)

El año 2005, por fin se cumplió una de las viejas aspiraciones de don José Maria, nuestro párroco, y por que no decirlo una vieja aspiración de toda la comunidad parroquial de Santa Ana. Por fin vimos como aquella cruz vacía  de líneas cuadradas y simples fue felizmente sustituida por una cruz arbórea y en ella se encuentra crucificado  el Hijo de Dios.  Sí, ahora más que nunca podremos decir que aquellas  palabras se cumplieron, nuestros ojos quedaran a partir de ese momento clavados en aquel al que traspasaron. Cristo a esta junto con todos nosotros, transmitiéndonos su entrega y amor, para que todos, absolutamente todos nos sintamos salvados por Él. Señor permítenos que nunca apartemos de tí nuestra mirada.

crucifiacdotrillo2Desde el 26 de Julio de ese año el nuevo Crucificado preside todas nuestras celebraciones en el templo que nos acoge. La nueva imagen, fue elaborada a tamaño real  en madera de cedro, siguiendo métodos tradicionales. La idea de la misma partió a raíz de la ejecución del grupo escultórico de Santa Ana, San Joaquín y la Virgen Niña que elaborara Raúl Trillo para la parroquia en el año 2001. Las ideas estaban claras por parte de nuestro párroco, así se lo quiso trasmitir al autor, de esta forma y siguiendo los consejos marcados se fueron elaborando los primeros bocetos  que daría origen al crucificado que ya se encuentra junto a nosotros Como toda buena obra, esta requiere de su tiempo, y pese a la tardanza en su elaboración ha merecido la pena esperar, pues sin lugar a dudas su presencia sirve para ennoblecer aun mas la visión del templo.

Centrándonos ya en la imagen propia que ha realizado Raúl Trillo, la misma representa un momento posterior a la lanzada. El Crucificado tiene el tronco ligeramente  desplazado hacia delante, despegando su  espalda del madero, mostrando ésta los síntomas evidentes de la flagelación.

Cabe destacar de la nueva imagen sobre todo la cabeza que se haya libre de corona de espinas, de esta forma posibilita una total y limpia visión de esta zona desde todos los ángulos. La testa presenta un ligero desplazamiento hacia la derecha y hunde crucifiacdotrillo1parte de la barbilla sobre el pecho, como muestra evidente del fallecimiento. Su mirada se haya perdida, es por ello que hace que su visión  sea impactante, sobre todo si su ángulo  se produce desde abajo hacia arriba, dando la impresión de que la misma nos está observando. Posee los pómulos de la cara marcados, y nariz aguileña, del mismo modo el autor ha querido que la nueva imagen tenga el bigote partido en dos mitades del cuerpo, podemos decir que se haya anatomizado, de complexión musculosa, y marcada. No presenta un excesivo uso de la sangre, en definitiva, nos presenta una muerte muy dulce, alejada de las imágenes cristíferas que últimamente se vienen realizando, es decir se haya más próxima a los postulados artísticos de la escuela granadina que de la hispalense. Las únicas señales de la pasión y muerte son algunas señas de sangre en las maltrechas rodillas que presentan los síntomas evidentes de las caídas, la llaga producida por la lanzada y  las zonas próximas a la incisión de los clavos.

La imagen se haya crucificada por las muñecas y no por las palmas de las manos.   Pero en esta nueva imagen el Cristo se halla crucificado por  cuatro clavos en lugar de los   tres que es lo habitual. Siendo por tanto uno de los pocos en Málaga que presenta esta singular peculiaridad. También cabe destacar de la misma, la disposición de los pies derecho sobre izquierdo que está evidentemente influenciado por el Crucificado que tallara MENA.

En cuanto a la disposición del paño púdico, no es excesivamente abultado, siendo anudado en el lado derecho, a través de una soga. El drapeado del paño púdico no es excesivamente abultado, por lo que el mismo se pega al cuerpo del Crucificado acentuando de esta forma más si cabe la anatomía del mismo.

Miguel Ángel Gutiérrez Cronista Archivero de la Hermandad